Una de las razones por la que a los tiburones les encantan los peces más pequeños es porque éstos, debido a su inexperiencia, se quedan estancados en situaciones que no son difíciles de resolver con un poco más de práctica.
Ser principiante en una partida de póker No-Limit puede ser muy emocionante, pero también puede salir muy caro, ya que los jugadores más experimentados son especialistas en aprovecharse de los fallos de los nuevos jugadores y de su facilidad para apostar todas las fichas.
Una de los puntos que no hay que olvidar para hacer dinero en el póker es esforzarte al máximo para minimizar las pérdidas a la par que se maximizan las ganancias.
Por eso vamos a analizar a continuación algunos de los pasos en falso más comunes entre los jugadores de póker con poca experiencia profesional.
1. Malinterpretar
Uno de los mayores errores es malinterpretar el Board o, en ocasiones, la propia mano. No hay nada más desmoralizante que apostar todo en el juego y luego descubrir que tus cartas no son tan buenas como pensabas.
Hay que reflexionar un poco más de tiempo sobre las cartas que tienes en la mano pero también sobre las cartas que están encima de la mesa. No hay prisa para apostar. Los jugadores novatos tienden a sobrevalorar sus capacidades y sus cartas, lo que puede crear que una esperada victoria se convierta en el hazmerreir de la mesa.
Unos 10 segundos de media es el tiempo que se necesita para reflexionar sobre la situación de la mesa y para dar a las cartas el valor que se merecen.
2. Hacer faroles
Para hacer un farol con probabilidades de éxito (es decir, apostar sin una jugada hecha), tienes que estar al menos en el tercer nivel del pensamiento del póker. Llegar a este nivel significa que el jugador es capaz de leer y reconocer las cartas de sus adversarios y descubrir qué es lo que van a hacer. Un nivel al que no llegan los principiantes.
El jugador de póker profesional Dan Harrington definía este error de los novatos que como "el farol del callejón sin salida".
Además, cuando se hace un farol, el jugador no debe olvidar que el adversario sigue jugando a pesar de que se haga una apuesta fuerte y que, si el farol sale mal, es una experiencia bastante deprimente.
3. Sobrevalorarse
Los principiantes suelen pensar que son mejores de lo que ellos mismos piensan y esa idea, aunque puede ser buena en algunas ocasiones, suele acabar en malos resultados. El error llega cuando el jugador se sobrevalora a sí mismo.
Intentar ser creativo y hábil sin conocer a la perfección la complejidad que conlleva el mundo del póker crea situaciones en las que la creatividad, más que ayudar, se acaba convirtiendo en un fracaso.
Y es que al innovar, si no eres un profesional, acabas jugando de manera débil y sin resultados, y los jugadores más experimentados se dan cuenta enseguida de esta situación y se aprovechan de la misma mientras que el novato piensa que ha tenido una racha de mala suerte.
4. Confiar en un draw
¿Dónde se podría situar el acuerdo entre los principiantes y un proyecto de flush? Es prácticamente imposible, independientemente del dinero que haya en juego, que un novato abandone la partida cuando tiene, por ejemplo, cuatro cartas del mismo palo.
Sin embargo, casi todos los principiantes en el mundo del póker han leído libros y conocen las posibilidades de que un hecho no ocurra. Es decir, si queremos completar una escalera abierta en la que nos falta una carta sólo lo conseguiremos una de cada 6 veces que lo intentemos.
A pesar de todo, los novatos suelen olvidar esos 10 segundos para reflexionar en la situación y apuestan de todas formas.
5. Una pareja son sólo dos cartas
La forma más fácil para un novato de perder las fichas de las que dispone es casándose con una mano.
Sin tener en cuenta lo que esté pasando en la mesa o cualquier otro tipo de influencia, la mayoría de los principiantes en el mundo del póker no son capaces de abandonar una mano Premium. Es como si en el momento en el que tienen AA, KK o QQ los novatos piensan que son indestructibles y que tienen el juego ganado. Sin embargo, y desafortunadamente para ellos, esto no es suficiente para llevarlos a la victoria.
Es verdad que son las parejas más altas que se pueden tener pero son simplemente eso: una pareja más. Y... ¿quién quiere apostar todo su dinero a una pareja?