En los siguientes artículos de estrategia vamos a tratar sobre las similitudes y las diferencias que existen a la hora de afrontar estratégicamente ambas variantes de Omaha, comenzando por la primera decisión importante: qué manos jugar.
Selección de manos a jugar
La selección de manos en Omaha Hi y en Hi-Lo tiene varios parecidos, aunque en realidad es completamente diferente la forma de afrontar el juego dependiendo de las cartas recibidas.
El Objetivo en Omaha Hi es maximizar la opción de tener las mejores cartas de la mesa, al igual que en todas las variantes del poker, buscando tener parejas altas y cartas conectadas en la mano antes de comenzar el juego.
Las mejores manos que se pueden tener en Omaha son dobles parejas de Ases Reyes (AA-KK) unidas en color entre ellas y pareja de ases con Jack y 10 (A-A-J-T) también de dos palos diferentes.
En Omaha Hi-Lo el objetivo es, además, tener un proyecto fuerte para el juego normal, pero con cartas que puedan optar también a la mitad del bote destinado a las manos bajas. En este caso, aunque también hay que intentar tener pareja de Ases, las cartas que la acompañan deberían ser cartas de poco valor (A-A-2-3 o A-A-2-4) y de dos palos diferentes.
Como habrás observado, en ambas variantes de Omaha, para tener una mano para poder jugar con garantías suele ser necesario tener una pareja de Ases. En Omaha suele ser factible que esté en la mesa la mejor mano posible, de forma que arriesgar con la segunda mejor opción no es un consejo apropiado.
Si eres un principiante y no juegas como los profesionales al leer las jugadas y las situaciones, debes saber que no es conveniente jugar manos sabiendo que las opciones de conseguir la mejor mano posible son reducidas.
La selección de manos en Omaha Hi-Lo es mucho más sencilla de hacer que en Omaha High ya que, por norma general, no se suele jugar a no ser que se tenga un As y un dos del mismo palo, teniendo además cartas que acompañen a estas.
Otro aspecto a tener en cuenta es que debes evitar jugar manos con una carta colgada, que no combina con las demás, porque de esta forma estarías jugando con tres cartas en lugar de hacerlo con cuatro como todos tus oponentes.
Por ejemplo, es mucho mejor jugar manos con A-A-3-4 que A-A-2-9 ya que en el último caso, el nueve no podría combinar con el resto de cartas y sería un lastre más que una ayuda.
Nuestro consejo es que en los inicios en el Omaha Hi-Lo solo se deben jugar manos que tengan al menos un As y un 2 o un 3 con cartas que ayuden a crear proyectos con estas, ya que son muchas las manos dudosas que pueden crear muchas dificultades.
En Omaha Hi existen muchas manos que pueden meter en serios problemas a sus poseedores debido a que son grupos de cartas que pueden dar mucho dinero, pero que también pueden hacer perder a sus propietarios todo el presupuesto acumulado.
El ejemplo más claro es tener cuatro cartas en escalera (Ej: K-Q-J-T) ya que dependiendo de las cartas que aparecen puede ser una mano realmente fuerte o puede tener muchas posibilidades de ser derrotada.
En Omaha la mayoría de las manos ganadoras suelen ser escaleras o mejores jugadas todavía, de forma que las parejas no tienen la importancia que sí tienen en Hold’em. El consejo para jugar Omaha es jugar solo manos muy fuertes ya que el resto de manos, la mayoría de las veces, no tendrán ocasión de ser lo suficientemente fuertes.
La mayoría de los jugadores profesionales de Omaha coinciden en que un par de Reinas en la mano no son lo suficientemente fuertes para aceptar una subida de apuestas.
Además si se juega Omaha Hi-Lo, solo se podría conseguir la mitad del bote, por lo que no suele merecer la pena arriesgarse con una jugada así.