El español deja la sala tras seis años de patrocinio. La voz del poker en español deja el equipo de élite de la sala de poker online más grande del mundo.
España se queda sin representante masculino en el Team PokerStars Pro. El Domingo de resurrección sirvió para que Juan Manuel Pastor hiciera oficial a través de su cuenta en Twitter que no seguiría formando parte del equipo de la Pica. Un divorcio muy sonado en todas las webs relacionadas con el mundo del poker y que ha dejado a más de uno helado.
"Hoy, día de Resurrección, buen momento para anunciar que no seguiré en PokerStars. Fueron 6 buenos años. Mis mejores deseos para PS en el futuro", relataba a través de su cuenta en Twitter, @PastorPoker.
Pastor se unió al Team PokerStars Pro en el año 2008. Durante este tiempo, el salmantino ha compartido equipo de profesionales con otros españoles, como Juan Maceiras, Ana Márquez o Leo Margets. Será precisamente esta última la única representante del equipo profesional de la pica por parte española, junto con Vicente Delgado "Codelsa" como miembro del Team Online.
Pastor ha ejercido de embajador de PokerStars, sin duda un buen sitio para jugar poker en España, durante todos sus años en la compañía, siendo un referente y, quizas, uno de los jugadores a los que se deba el boom del poker en nuestro país. Sus conocimientos del mercado y del cómo comunicar e interactuar con los telespectadores le hará eterno en la memoria de todos. Incluyendo una de las presentaciones más famosas para los aficionados a jugar al poker.
"...Señoras y señores, damas y caballeros, seres de todo credo, raza y condición...¡bienvenidos al maravilloso mundo del poker!...", así comenzaba Pastor sus retransmisiones, unas frases que esperamos seguir escuchando muchos años.
"Lo más bonito fue llevarnos en su momento a la gente, llevarles esa alegría y esa pasión. Llevar algo nuevo a la gente, creo que ha sido lo más bonito", comentaba Pastor sobre su faceta televisiva en una entrevista en PokerListings.es.
El ya ex miembro del Team PokerStars Pro ha sido la voz en off del poker nacional en todos los eventos retransmitidos por los distintos programas, sobre todo el European Poker Tour, un torneo donde, precisamente sigue teniendo el mejor balance de los jugadores españoles en toda su historia.
Nada más y nada menos que doce han sido las cajas que Pastor ha obtenido en los EPT a lo largo de su trayectoria. Su culmen llegó en 2011, cuando alcanzó la final del EPT de Londres, donde acabó cuarto clasificado y se llevó para su casa un premio de 200.000 libras.
Un punto álgido que tuvo el comienzo en los primeros años de vida de Pastor. Con solo seis años, el salmantino comenzó a conocer las cartas por medio de su abuelo, quien le enseñó la pasión por el mundo del poker, así como las reglas del poker más importantes. Un juego entonces marginado, y que tendría que esperar hasta muchos años después para tener la categoría que ahora veneramos.
Después de estudiar ingeniería y periodismo, y ser alto ejecutivo para una empresa de publicidad y marketing, el primer éxito para Pastor le llegaría en 2006, cuando consiguió hacer caja en dos de las pruebas del Campeonato del Mundo de Heads-Up en Barcelona.
Luego, Campeón de la prueba del Campeonato de España de Poker en Valladolid en 2008, sexto en el European Masters of Poker en Barcelona en 2009, y otros muchos títulos que podríamos relatar para uno de los mejores jugadores de la historia del poker en España.
Un jugador convencido de cambiar las cosas en el poker nacional desde todos los ámbitos, por ello es en la actualidad el Presidente de la IFP España, un cargo con peso en el panorama internacional y que le permiten opinar acerca de la legislación en nuestro país con respecto al juego.
"Creo que no se ha cogido un modelo correcto y que se ha legislado sobre algo que se tenía un casi completo desconocimiento. Entonces, si no sabes y te fijas en modelos que no son buenos, entonces te sale un Frankenstein que se te va de las manos", afirmaba Pastor sobre la legislación española.
Pese a su marcha de PokerStars, seguro que aún nos queda Juan Manuel Pastor para rato.
Un grande.