Rodeado siempre por el escándalo y famoso por sus múltiples vicios, Larry Flynt fue tanto el fundador de la revista Hustler como un apasionado gambler y jugador de poker. Probablemente ya sabías todo esto.
Pero, ¿sabías que Larry Flynt estuvo apoyando (apostando y bancando) a la leyenda del poker noruego Thor Hansen por décadas?, ¿que estuvo muy cerca de envenenar a Stu Ungar?, ¿o que incluso fue el propietario de su propio casino?
La historia de Larry Flynt es el relato de uno de los hombres que hizo de Las Vegas todo lo que es hoy: la mejor ciudad y la más loca de toda la Tierra.
Flynt también “invirtió” (perdió) muchísimo dinero en las mesas de cash de grandes apuestas, razón más que suficiente para incluirlo en esta serie.
La vida de Larry Flynt llegó a ser de dominio público después de que viese la luz y llenase los cines de todo el mundo la película “The people Vs Larry Flynt” (El escándalo de Larry Flynt) con Woody Harrelson y Courtney Love.
Nacido en 1942, comenzó a amasar su dinero con un bar de topless, siendo su gran máquina de hacer dinero la revista Hustler, millones de beneficio que fueron insuficientes para protegerle.
Flynt fue el defensor de uno de los procesos más conocidos en la historia de EEUU y el “cuerpo del delito” no fue otro que la libertad de prensa (libertad de expresión).
Como buen protagonista de nuestras historias de gansters, Flynt llegó a estar en prisión, pero eso no impidió que su revista semi-pornográfica Hustler se mantuviese en el mercado.
Larry Flynt tenía multitud de enemigos pertenecientes a un grupo radical (ser el dueño de una revista como Hustler lleva consigo la oposición de este tipo de grupos), esperándole uno a la salida de un juicio para dispararle.
Flynt sobrevivió, pero el disparo le provocó la parálisis de toda la parte inferior del cuerpo (de cintura para abajo). Este hecho no le impidió continuar amando la vida, así como el poker, su mayor hobby.
Al igual que ocurría con multitud de estadounidenses, Larry conocía el juego desde niño. Siendo ya adulto tuvo la suerte de tener el dinero para poder jugar con los mejores.
Flynt llegó a ser realmente conocido en las mesas de grandes apuestas en los setenta, estando valorados sus activos en 400 millones de dólares, lo que hizo que para Flynt las pérdidas en el poker nunca fuesen vistas como un problema.
“El dinero no es importante para mí” son palabras de nuestro protagonista. “Quiero jugar con los mejores jugadores del mundo y quiero tener la especial oportunidad de optar a ganar. Estoy dispuesto a pagar por ello. Podría jugar fácilmente contra jugadores amateur (y peores), pero no sería divertido”.
La definición que Larry Flynt tiene de la diversión estuvo muy bien mostrada en un documental de 2004, el cual mostró a este jugando en su propio casino en Gardena (California). Flynt estaba sentado en una mesa de 2000$/4000$ (500$ de ante) de Seven Card Stud, jugando contra Chip Reese, Phhil Ivey, David Oppenheim, Frank Thompson y Danny Robison.
El bote medio era de 40.000$ y el juego era rápido y agresivo. Uno de los dealers comentó que Flynt perdía aproximadamente 300.000$ por mes, incluso teniendo en cuenta que era considerado como un buen jugador de Stud.
A pesar de que Flynt es una de las grandes ballenas de la historia del poker, su vida ha estado llena de historias de éxito.
Uno de sus rivales favoritos no era otro que la leyenda del poker Stu Ungar, del que Flynt dijo una vez: “Stu tiene un terrible temperamento, por lo que era muy fácil irritarle. Recuerdo una mano donde conseguí escalera, ganándole a su set. Apostó, fui all-in y aceptó este. Cuando vio mis cartas dijo –fuck this- y volteó la mesa”.
Stu Ungar incluso intentó culpar a Larry de intento de asesinato. Esto fue en 1978, Flynt tenía un inmenso dolor de forma continua causado por el disparo recibido. No fue hasta los 90 cuando pudo eliminar por completo el dolor gracias a una nueva cirugía. Al no poder moverse, tenía que estar siempre en una silla de ruedas de 80.000$.
Por aquella época, Flynt llegó a ser adicto a una bebida narcótica conocida como el cocktail Brompton que consistía en un 60% de morfina, 30% de alcohol y 10% de cocaína.
Debido a que estaba inválido y enfermo (con grandes dolores), Flynt podía usar de forma legal estas sustancias. Un buen día, Ungar le dijo que él también quería uno de esos cocktails.
Stu había sido adicto a las drogas y pensó que podía soportar el Brompton. Cuando recibió el cocktail fue al baño para bebérselo allí y nunca más volvió.
Dos miembros del staff del casino fueron enviados para ver qué había ocurrido con Ungar. Flyn dijo posteriormente en una entrevista: “lo encontraron tirado en el suelo totalmente inconsciente. Cuando volvió en sí me acusó de haber intentado matarle”.
El poker para Flynt no era tan solo el juego en sí, sino que lo veía como un negocio. Una de sus decisiones fue apoyar y bancar al jugador y leyenda del poker noruego Thor Hansen, quien vivió en Las Vegas durante décadas antes de regresar a Europa en 2012 cuando le descubrieron cáncer.
En 1998, Larry Flynt incluso compró su propio casino. Se quedó con El Dorado, el cual estaba en bancarrota, e invirtió 30 millones de dólares para devolverlo a la vida y al éxito.
A día de hoy (y todavía teniendo a Flynt con vida), es posible denominarlo como uno de los más grandes perdedores en el mundo del poker, aunque es necesario añadir una “nota al pie”, al contrario que la mayoría de los grandes perdedores en el poker, Flynt siempre pudo hacer frente sin problemas a sus pérdidas.
En 2014 estuvo en lo alto de la clasificación de manager con mejores ganancias en la revista “People with money”.